La odontofobia o miedo al dentista, es el estado de angustia que experimenta un paciente cuando visita al dentista.

Si esto te pasa, no estás solo. El miedo al dentista es un sentimiento bastante frecuente en la población mundial. Por esto es que muchas personas evitan su revisión recomendada o hacen lo que sea para evitar la visita al dentista aun cuando sienten algún malestar bucodental.

En casos particulares, ese miedo está asociado a factores psicológicos específicos y no tan frecuentes o evidentes y estas deben identificarse y tratarse con el acompañamiento de tu psicoterapeuta. Estos son casos más complejos.

En esta ocasión, quiero mencionarte las cuatro razones más frecuentes y generales que dan lugar a la odontofobia. Y por supuesto, algunas recomendaciones que atenuarán esa sensación.

Las cuatro razones más frecuentes que generan la odontofobia son:

  1. Ansiedad
  2. Culpa
  3. Verguenza
  4. Miedo al dolor

Para atenuar la ansiedad es recomendable que busques una clínica con buenas referencias. Eso da confianza y va a generar un poco de tranquilidad. Contacta, si te es posible, a la clínica odontológica y pide información sobre algún tema de tu interés. Y si la persona que te atiende por medio de mensajería instantánea (como whatsapp o mensaje sms) o por vía telefónica es cordial y atenta te generará aun mayor confianza y tranquilidad.

Es una buena recomendación hacerte acompañar por alguien de confianza. Esta persona, familiar o amistad, puede darte apoyo emocional para que no sea desagradable tu visita. El que puedas conversar hará que tu mente no alimente demasiado ese miedo o ansiedad.

Es recomendable que llegues a tiempo a tu cita. Si vas tarde, el estrés por ir retrasado a la cita te podría generar una respuesta emocional inconveniente y aumentará la ansiedad.

El miedo que puedes experimentar podría incluso no tener un motivo identificado. Analiza tu miedo. Busca identificar cuáles razones existen. En la mayoría de los casos entender por qué te genera miedo visitar al dentista, hará mucho menor ese sentimiento. En caso de haber tenido una muy mala experiencia que te haya creado traumas, siempre puedes tratarlo en orientación psicológica y así vencerlo.

Solicita tu cita lo más pronto posible. Cuanto antes tengas tu cita más rápido sentirás que saldrás de eso. Además, si ya tienes una molestia en tu boca el problema podría empeorar. Esto facilitaría que la experiencia se complique y no sería bueno para eliminar tu miedo.

Puedo asegurarte que en la mayoría de los casos el miedo al dentista es exagerado. El no saber qué va a pasar produce ansiedad y estrés. Habla con tu dentista de tus sensaciones. Coméntale tu miedo. El profesional te dará información sobre tu caso y posiblemente te explique breve y sencillo el procedimiento. Aunque no lo parezca, el conocer qué va a pasar baja la ansiedad y aumenta tu confianza.

La culpa y vergüenza que puedes experimentar generalmente se produce por pensamientos como «hubiera venido antes», «no debí dejarlo tanto tiempo», «el dentista va a pensar que soy descuidado»y otros pensamientos similares. Habla con el profesional sobre lo que piensas. Él sabrá guiarte a un mayor estado de relajación y bienestar.

Una recomendación adicional que quiero darte es que no tomes mucho líquido. si lo haces podría necesitar usar el baño y vas a estar incómodo durante el procedimiento médico. No escuches música ni muy alto el volumen ni muy rítmico, esto estimula tus sentidos y podría aumentar el dolor o la ansiedad. Elige un poco de lectura. Un tema que te distraiga. Te ayudará mucho.

Y piensa en los beneficios que obtendrás después de visitar a tu dentista. Te hará ver el proceso como necesario y lo que ganarás será mucho más duradero y valioso.

La próxima vez que visites al dentista, utiliza estas recomendaciones para hacer de ella una experiencia más placentera.

Hasta pronto,

Hibert Coca